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Bienvenido al Parque de Viña Santa Rita
Buscando elevar la gran diversidad endémica de Chile, Santa Rita presenta su vino icono Casa Real y el conjunto de vinos ultra premium, cada uno con algo que contar sobre la historia de este centenario parque.
Desliza y descubre
En 1985, Santa Rita se desafía a producir el mejor vino posible usando uvas de los viñedos en Alto Jahuel, Alto Maipo. Un vino que pudiera pararse hombro a hombro con las grandes cosechas del mundo. Después de cuatro años, nace el vino ícono de Viña Santa Rita: Casa Real Reserva Especial. La etiqueta de este vino está identificada con el patrimonio histórico de la viña; el grabado de la antigua casa patronal de su fundador, Domingo Fernández Concha, que hoy en día es el actual hotel boutique Casa Real. Tras 140 años de historia, esta imagen se mantiene intacta.
En 2013, Casa Real Reserva Especial obtuvo uno de los reconocimientos más relevantes del mundo: ser nombrado Wine Legend por su cosecha de 1989 por la prestigiosa revista británica Decanter, siendo el primer vino de Sudamérica en ostentar este título. En 2021, Casa Real concreta otro hito en su ilustre historia, anunciando su ingreso a la prestigiosa Place de Bordeaux; la red de distribución de vinos finos más exclusiva del mundo.
Casa Real Reserva Especial tiene sus orígenes en el antiguo bloque de Carneros Viejos, el cual fue plantado a mediados de 1970 con una selección masal de Cabernet Sauvignon. Las mejores parras han sido seleccionadas por décadas a través de análisis en los viñedos y en el vino, siempre buscando obtener equilibrio y bajos rendimientos para resguardar su esencia. El viñedo ha sido dividido en varios bloques pequeños a través del tiempo, donde cada una de estos presenta características únicas que son esenciales para la mezcla final.
Alto Jahuel está ubicado a los pies de la Cordillera de Los Andes a 565 metros sobre el nivel del mar y a 30 kilómetros al sur de la capital de Chile, Santiago. Los viñedos están ubicados sobre depósitos aluviales cuaternarios, y las primeras parras fueron plantadas a mediados de 1600. Desde sus inicios, la cepa Cabernet Sauvignon ha sido la principal variedad en esta zona.
El clima mediterráneo de Alto Jahuel se caracteriza por una larga estación seca. Las lluvias se concentran principalmente en los meses de invierno con una precipitación anual promedio de 380 mm. La primavera es fría y seca, y los veranos calurosos con temperaturas que superan los 30ºC. La influencia de la Cordillera de los Andes provoca una importante oscilación térmica entre el día y la noche. Las temperaturas comienzan a bajar a finales del verano y principios del otoño, lo que permite que las uvas maduren gradualmente con una buena concentración de fruta y una adecuada maduración de taninos.
Los suelos del bloque Carneros Viejos están compuestos por antiguos depósitos aluviales del Río Maipo. Estos suelos tienen un grano fino en la capa superior con depósitos aluviales de grano grueso en el subsuelo; piedras redondeadas y gravas se mezclan en un matriz arenosa.
Esto asegura un gran drenaje, aunque el contenido de arcilla en el subsuelo juega un relevante papel en la retención de agua y el carácter único de Casa Real Reserva Especial.
Casa Real Reserva Especial solo se elabora en años de cosecha excepcional, su última cosecha fue en la temporada 2018, que a criterio del propio enólogo, fue descrita como fantástica en Alto Jahuel. El inicio fue con una primavera más cálida para ir luego bajando las temperaturas levemente con respecto al histórico, lo que se logra traducir en uvas con mayor acidez y homogénea madurez. El vino ícono Casa Real Reserva Especial 2018 sigue siendo una versión clásica de este reconocido terroir, demostrando una gran concentración y elegancia. Sus aromas están dominados por cassis, cereza y grafito, el dulce paladar medio refleja su origen con taninos sedosos y firmes que se sostienen suavemente en la boca para un final largo y de gran persistencia.
En 1991, debido a una escasez de Syrah, Viña Santa Rita optó por importar desde Estados Unidos la poco conocida Petite Sirah. Ya en Chile, esta variedad se injertó en viejos parrones para respetar la cuarentena de una cepa nueva en el país. Pero aún cuando pudo replantarse en otros valles, el viejo parrón originario siempre dio los mejores resultados.
Así nace este innovador proyecto enológico. La etiqueta está inspirada en la extraordinaria buganvilia del frontis de la escalinata del actual Hotel Casa Real, la que florece cada año durante el verano, vistiendo todo de malva.
La prestigiosa guía de vinos Descorchados, escrita por el periodista especializado Patricio Tapia en su última edición 2020, le otorgó 92 puntos a la cosecha 2017, destacando como la calidez del Valle Central en esta temporada, se reflejó en sus notas frutales, confitadas y especiadas. Su poder en boca, sus taninos potentes y olor de especias y café. "Un estilo de vieja escuela, de los que se hacían en Chile hace una década."
El viñedo Petite Sirah tiene solo dos hectáreas y está formado por viñas injertadas en una pérgola hace más de tres décadas.
Alto Jahuel está ubicado a los pies de la Cordillera de Los Andes a 565 metros sobre el nivel del mar y a 30 kilómetros al sur de la capital de Chile, Santiago. Los viñedos están ubicados sobre depósitos aluviales cuaternarios, y las primeras parras fueron plantadas a mediados de 1600.
El clima mediterráneo de Alto Jahuel se caracteriza por una larga estación seca. Las lluvias se concentran principalmente en los meses de invierno con una precipitación anual promedio de 380 mm. La primavera es fría y seca, y los veranos calurosos con temperaturas que superan los 30ºC. La influencia de la Cordillera de Los Andes provoca una importante oscilación térmica entre el día y la noche. Las temperaturas comienzan a bajar a finales del verano y principios del otoño, lo que permite que las uvas maduren gradualmente con una buena concentración de fruta y una adecuada maduración de taninos.
El suelo franco tiene una capa de arcilla que retiene la humedad y otra de piedras que facilita el drenaje, lo que hace que el viñedo no dependa demasiado del riego externo.
En nariz es un vino que muestra gran elegancia, con vivos aromas de frutos negros en equilibrio con especias dulces, además de matices de tierra y humo mezclados con notas balsámicas propias del Maipo. En la boca, su amable dulzor inicial da paso a una jugosa acidez. En su largo final hay notas ahumadas de chocolates y especias.
Pewën de Apalta es nuestro top Carménère. Elaborado a partir de un pequeño bloque de viñedos de secano plantado en 1938, este vino refleja todo el potencial de la variedad. Esta cepa fue redescubierta en Chile en 1994, luego de creerse extinta por casi dos siglos. Procedente del pequeño terroir de Apalta, lugar de origen de los mejores ejemplos de esta variedad en Chile. Hoy, encuentra su inspiración en la araucaria, un árbol nativo y sagrado de Chile que está presente en el centenario parque de Santa Rita.
Descorchados en su edición 2020 posicionó a Pewën de Apalta dentro del ranking de los Mejores Carménère de Chile, otorgándole 97 puntos a su cosecha 2018. Además, reconoció a este vino como “El Mejor de Apalta”.
El viñedo fue plantado en 1938 y está ubicado en la parte baja de una suave pendiente con orientación sur, que significa menor exposición y vegetación más densa.
Ubicado en una región vitivinícola Premium, el Valle de Apalta se inserta en medio del Valle de Colchagua, 190 km al sur de Santiago. Santa Rita es el mayor productor de vinos del sector de Apalta, mientras el Valle de Colchagua es el principal terroir del país para el Carménère de clase mundial.
Aquí, la condición térmica es sub-húmeda, con una temperatura promedio anual de 14,7ºC (58ºF) y un promedio de precipitaciones de 684 mm. El factor climático más importante en Apalta es la oscilación térmica que puede superar los 20 ºC. Casi no hay heladas. Destaca la brisa fría proveniente de la costa por el río Tinguiririca.
Los suelos en Apalta se catalogan en tres; zona alta, media y baja. La zona alta y media contiene sedimento granítico depositado en la base de las laderas de cerros con textura franca – arenosa –arcillosa en la zona alta y franca, y arenosa en la zona media.
La zona baja se caracteriza por tener depósitos aluviales de textura franca - arcillosa y arcillosa.
Vino de intenso y profundo color rojo carmín. Complejo bouquet que combina frutas frescas rojas y negras y tonos especiados propios de la variedad, elegantemente combinados con los caracteres otorgados por la madera. En boca es concentrado y con un frescor que se desarrolla de la acidez y caracteres propios de la variedad asociados a su estructura; profundo, es un vino sabroso, persistente y de gran potencial de maduración.
Se elabora a partir de Cabernet Franc, una noble variedad altamente reconocida en todo el mundo, sumado al elegante Cabernet Sauvignon, una de las cepas más emblemáticas de Chile, proveniente del reconocido Alto Maipo. Cuenta además con un toque local al agregarle a la mezcla un porcentaje de Carménère, lo que le otorga frescura y especias a un vino potente y estructurado. Su etiqueta está inspirada en “La Primavera”, parte de las esculturas que conforman Las Cuatro Estaciones de la fundición francesa Val d’Osne, ubicadas dentro del centenario parque.
Durante 2019, Triple C fue reconocido como uno de los 100 mejores vinos del mundo por la revista Wine Enthusiast en su ranking “Top 100 Cellar Selection”, que destacó los principales vinos de guarda disponibles en el mercado.
La variedad Cabernet Franc, ubicada en Alto Jahuel, ha sido plantada sobre suelo coluvial franco-arenoso-arcilloso de 0,8-1,0 m de profundidad, con un subsuelo de grava que proporciona un excelente drenaje.
El Cabernet Sauvignon proviene de Alto Jahuel. Su manejo es muy similar, sin embargo, su rendimiento es menor a 5.500 kg/ha y la condición de estrés hídrico es más severa para obtener una buena maduración.
El Carménère es un viñedo de 70 años situado en la ladera sur del piedemonte de las colinas del Valle de Apalta. Ubicado en una región vitivinícola Premium, el Valle de Apalta se inserta en medio del Valle de Colchagua, 190 km al sur de Santiago.
Santa Rita es el mayor productor de vinos del sector de Apalta, mientras que Colchagua es el principal terroir del país para el Carménère de clase mundial.
Este vino destaca por su intenso color rojo rubí. La nariz es delicada con intensos aromas a cerezas negras, chocolate negro y regaliz. Los taninos son firmes e intensos con gran complejidad que aparecen en todo el paladar. Concentrado, elegante y bien equilibrado, con buena estructura y suficiente profundidad para envejecer bien en los próximos años.
Esta línea de vinos es el fiel reflejo de un trabajo honesto y basado en el origen, destacando por su innovación vitícola. De esta forma, su portafolio está conformado por las siguientes variedades, cada una con una expresión única desde el origen: Cabernet Franc, Cabernet Sauvignon, Carménère, Chardonnay y Field Blend Blanco. Su fuente de inspiración: el laberinto del jardín de Doña Paula, conformado por boj, árboles centenarios y muchas flores.
Las uvas de este vino proceden de un bloque muy antiguo y especial de Carménère en el corazón de Apalta, Valle de Colchagua. Los suelos de las estribaciones son de profundidad moderada y buena permeabilidad. Las fracturas en el granito permiten que las raíces crezcan profundamente y que las vides desarrollen un equilibrio único, un vigor controlado y produzcan uvas que expresan la tradición de este viñedo tradicional de secano. NOTAS DE CATA: Color púrpura con matiz intenso y buena profundidad. Es un vino concentrado largo y fresco, con frescos aromas frutales de arándanos, moras y notas florales de violeta. Un auténtico Carménère que se deja beber fácilmente.
Este vino proviene de un bloque de Cabernet Sauvignon plantado en las laderas de los viñedos de Alto Jahuel, Valle del Maipo. El suelo es de origen coluvial con un alto contenido de piedras angulares y una baja concentración de arcilla, lo que regula el crecimiento vegetativo dando un equilibrio homogéneo. NOTAS DE CATA: Un vino tinto rubí intenso y profundo, donde predominan los aromas de fruta roja: cereza y frambuesa. De fondo, notas de piedra y grafito con una madera bien integrada dando un paladar amplio y concentrado. Fresco, estructurado y con un final largo y persistente.
Este vino proviene de la parte más alta de los viñedos en Pumanque, una de las zonas más cercanas a la costa de Colchagua. El viñedo fue plantado en 2002. Las brisas marinas tienen un efecto importante en el enfriamiento de los viñedos, logrando una lenta madurez al final de la temporada. NOTAS DE CATA: Un vino tinto rubí intenso, con una delicada intensidad aromática con notas de frutas rojas, especias y hierbas secas. La madera está detrás, entregando suavemente una capa de aromas como cedro y bosque húmedo.
Este vino proviene de suelos típicos de la segunda terraza del Valle de Limarí y consisten en depósitos aluviales con un primer estrato de textura arcillosa y un segundo de franco arcilloso con piedras. La uva se vendimió a mano y se trasladó a las bodegas durante la noche, lo que asegura una caída de temperatura natural para el procesamiento de 10-12ºC. NOTAS DE CATA: Un vino de color amarillo pajizo brillante. En nariz es un vino elegante, austero y seco, dominado por frutas blancas, flores, melocotón blanco y pera, con un toque mineral de piedra.
Un blend de uvas blancas que crecen mezcladas en el mismo terroir de Apalta: Semillón, Sauvignon Vert, Moscatel, Torontel y Corinto. En el pasado, estas uvas se consumían frescas como uvas de mesa. Hoy, se ha elaborado con una mínima intervención y como si fuera un tinto, fermentado con sus hollejos, haciendo honor a la forma más antigua de elaboración de vino en Chile. NOTAS DE CATA: Un vino de color amarillo pajizo intenso y brillante. La vinificación de este vino le brinda una tremenda intensidad aromática, paladar firme, buena estructura y excelente acidez.
